La Piracema es el movimiento de cardúmenes de peces que nadan río arriba contra la corriente, durante el período de cría, para desovar. La palabra tiene su origen en el idioma tupí, que significa “salida de pez”, “movimiento para subir” (pira significa pez, mientras que cema significa ascenso). En la mayor parte de Brasil, la piracema coincide con el período de lluvias de verano, con una duración de alrededor de 4 meses, en la mayoría de los estados entre noviembre y febrero. En los estados del sur, comienza en octubre y termina en enero. En Roraima es diferente, se realiza entre marzo y junio.
Antes del fenómeno, la naturaleza ya envía señales, que son percibidas por los peces, de que se acerca la época favorable para la reproducción. Los días más cálidos, las lluvias frecuentes y el agua más oxigenada hacen que millones de peces, machos y hembras, dispersos en los ríos se agrupen en grandes cardúmenes, preparándose para el ascenso. Los peces de la piracema, también conocidos como migradores, necesitan realizar un intenso esfuerzo físico para subir al río. Esto aumenta la producción de hormonas y la quema de grasa, mejorando el proceso reproductivo. Sin embargo, en este período también se convierten en presa fácil, debido al cansancio físico.
Durante la reproducción de los peces, la pesca comercial está restringida, por lo que los gobiernos federal y estatal instituyen una temporada de veda para ríos y aguas continentales durante el desove. El “Período de Defeso” es una de las medidas creadas junto con el Código de Pesca, desarrollado por el gobierno brasileño en 1967, con el objetivo de garantizar la protección de los períodos de reproducción de la especie. En este momento no se puede pescar con red de enmalle, por ejemplo, porque es un equipo no selectivo. Solo se permite la pesca de subsistencia por parte de las comunidades, aun así existe un límite diario que se debe respetar, para que no se produzca un desequilibrio.
Las acciones e intervenciones humanas, además de la pesca criminal, pueden interferir en el proceso reproductivo de estos animales. El impacto ambiental de las represas y diques, por ejemplo, es gigantesco, pues aniquilan el ciclo natural de reproducción de varias especies de peces que migran durante la piracema. Las presas son obstáculos importantes en el río, ya que la mayoría de los peces adultos no pueden trepar para volver a la cabecera, incluso con las supuestas "escaleras de agua" al costado de estos edificios. Si son un obstáculo insalvable para los adultos, también lo son para los jóvenes, que quedan en una situación de desprotección y mueren antes de llegar a las llanuras aluviales.
El “Período de Defeso” permite que la especie se reproduzca en un volumen satisfactorio para que su pesca posterior no sea depredadora y provoque su extinción. Por tanto, este es el período que garantiza la sostenibilidad de la práctica de la pesca, en medio de tantas acciones humanas que interfieren en el ciclo reproductivo de estos animales. Este es un momento crucial para la supervivencia de la especie y, por lo tanto, es fundamental que la pesca se restrinja a las áreas definidas por el IBAMA y la Secretaría de Medio Ambiente, acompañada de acciones de concientización sobre la conservación de especies en peligro de extinción.
REFERENCIAS
1. FISH TV. Brasilienses - As ameaças ao dourado na bacia do Rio Uruguai. Youtube, 2021. Disponível em: . Acesso em: 2 de abril de 2022.
2. O que é a piracema? SUPER Interessante, 2018. Disponível em: . Acesso em: 5 de abril de 2022.
3. PIRACEMA. Instituto Estadual de Florestas. Disponível em: . Acesso em 5 de abril de 2022.
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